La nueva balsa de residuos mineros tendría una vida útil de 15 años, una extensión de 90 ha (más de 180 campos de futbol) y una capacidad de 150 hm3 (mayor que el embalse de Aracena, con 128 hm3). Pone en riesgo la cuenca de abastecimiento de la presa de Alcolea.