Una carreta de Triana llora

Pilar Enjamio recuerda al que fue su padrino rociero. Pepe 'El Mármol', chucenero siempre junto al simpecado de Triana, falleció hace pocos días. 

La carreta de 'El Mármol' ya no tendrá a Pepe cantando al camino, al Simpecao trianero, a las marismas y su Blanca Paloma. A través de mis palabras quiero devolverte a la vida recordándote, a ti padrino rociero, hermano, amigo del alma y sé que en lo Alto presentarás el libro de tu vida con las mas bellas páginas jámas escritas.

Siempre existe una cara y una cruz en toda vivencia, en toda historia. Mi comienzo de camino rociero no fue bien y apareció una persona buena, que sin conocerme de nada me ofreció su carreta, su casa en esta bendita hermandad de Triana y ese compartir con su familia. La familia de un gran hombre.

Ahora que eres una estrella recordaré más que nunca mi nombre de bautismo: Estrella de la Mañana. Una acción cambia totalmente el rumbo y significado de una situación tornándola de oscuridad en luz, gracias a seres especiales. Y 'El Mármol' lo era. Con ese respeto y éxtasis a su simpecado y a la carreta de plata. Soñaré con esos viajes en charré, con esa cerveza que nos ofrecias al compas de unas sevillanas, con las bodas rocieras de Francisco Alberto y Villarán que comparti con tu mujer y contigo, a los que llamo hermanos del alma, y con tantas y tantas cosas que nos has transmitido. Chucena te llora, Triana te llora, todos te lloramos y tu carreta se ha quedado triste y llora por tí. 

  Maria Pilar Enjamio.