Hallan huellas en el caso de Almonte que no corresponden ni a las víctimas ni al acusado

También encuentran un pelo sin identificar en uno de los baños de la vivienda.

El doble crimen de Almonte parece dar un nuevo giro cerca de tres años después desde que se encontraran los cuerpos sin vida de Miguel Ángel Domínguez y su hija de ocho años. Un estudio de la Guardia Civil revela ahora la existencia de nuevas huellas en la vivienda de Almonte donde fallecieron, que no corresponden ni a las víctimas ni al acusado de los hechos, en prisión preventiva desde 2014, ni a las personas que solían entrar en la casa, tal y como ha adelantado la agencia Europa Press.

Los investigadores han encontrado así “tres o cuatro huellas dactilares en la puerta de acceso a la vivienda de la planta de arriba y en una hucha perteneciente a la menor”, que no son ni del padre o su hija ni del único sospechoso.

Asimismo, otro informe realizado por el Instituto Nacional de Toxicología ha revelado que se encontraron también restos de ADN en la vivienda que tampoco pertenecen ni a las víctimas ni al acusado, y han hallado además un pelo sin identificar en uno de los baños.

Según ha publicado Europa Press, este informe se sumó al grueso de la investigación hace alrededor de un año, pero fue obviado por las acusaciones y por la jueza instructora.