Greenpeace sigue parapetada en Doñana
Los miembros de la ONG han conseguido parar las obras del proyecto de extracción y almacenamiento de gas en el Parque Nacional
Doce horas llevan algunos de los activistas de Greenpeace encadenados a maquinaria de la instalación gasística que Gas Natural Endesa tiene en el entorno del Parque Nacional Doñana desde que a las 8 de esta mañana comenzara una acción pacífica de protesta para paralizar las obras de extracción y almacenamiento de gas en este espacio protegido.
Greenpeace mantiene un campamento de resistencia a la entrada de la instalación, otro en lo alto de una de las estructuras en la zona del proyecto y un grupo de activistas ha parado y se ha encadenado a maquinaria de la instalación gasística.
A lo largo de toda la jornada la organización ecologista está recibiendo numerosas muestras de ánimo desde las redes sociales. Bajo el hashtag #resistenciaDonana, Greenpeace están dando a conocer de forma actualizada toda la acción sobre el Espacio natural de Doñana y están recogiendo firmas en su web para la paralización del proyecto "Marismas" de la empresa gasística. Mientras, Gas Natural Fenosa y Enagás ya han presentado sendas denuncias. 
“Greenpeace está haciendo el trabajo que no han hecho las administraciones, proteger nuestro medio ambiente. Y nos mantendremos aquí hasta que cumplan con su responsabilidad de hacerlo”, ha declarado Julio Barea, responsable de campaña de Greenpeace. Con esta acción, Greenpeace quiere denunciar que el proyecto es tan peligroso como innecesario y aleja a España de cumplir con los compromisos que va a asumir al ratificar el Acuerdo de París mañana en el Congreso de los Diputados.
