Unidas Podemos por Huelva celebra la subida del SMI a mil euros

Rossi destaca que esta subida del SMI es “muy favorable” para las familias trabajadoras onubenses y para todo el entramado económico provincial.

La portavoz de Unidas Podemos en el Ayuntamiento de Huelva y coordinadora local de Izquierda Unida, Mónica Rossi, celebra la subida, una vez más, del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), recién acordado con los sindicatos UGT y CCOO, gracias al esfuerzo realizado por el Ministerio de Trabajo, con Yolanda Díaz al frente. Rossi valora que esta subida del SMI hasta los mil euros mensuales, “pone, mediante la decisiva intervención de Unidas Podemos en el Gobierno, un peldaño más para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores; en definitiva, de la gente humilde y luchadora que mantiene nuestra economía en marcha, lo que es nuestro principal objetivo político en las instituciones”. 

Rossi destaca que esta subida del SMI es “muy favorable” para las familias trabajadoras onubenses y para todo el entramado económico provincial, “ya que como se está demostrando desde el Ministerio de Trabajo, mejorar las condiciones laborales y salariales favorece el crecimiento económico, la creación de empleo y la estabilidad laboral, frente a los agoreros de la derecha que aseguran errónea e interesadamente que las mejoras sociales perjudican a la economía”. Hay que tener en cuenta que el salario medio en Huelva es uno de los más bajos de España, con 13.651 euros anuales. De este modo, el nuevo SMI alcanza el 62% del salario medio provincial, cumpliéndose uno de los objetivos de la Carta Social Europea.

La representante de Unidas Podemos por Huelva añade que la subida del SMI va a beneficiar, en la provincia onubense, a colectivos laborales masivamente feminizados, como las trabajadoras agrícolas, las empleadas del hogar, las trabajadoras de ayuda a domicilio y de otros sectores como la hostelería, donde el SMI marca los salarios. En este sentido, Rossi añade que esta subida y la reducción de la temporalidad laboral “son herramientas concretas destinadas a luchar contra la pobreza y la precariedad laboral que seguimos afrontando las mujeres en el mercado laboral, por tener que trabajar con salarios más bajos y soportar la brecha salarial más alta del país, mayores índices de precariedad y soportando unos índices de paro mucho más altos”.