Podemos Huelva cree que su alianza con IU "ha restado"

Pepa Gallardo difiere del planteamiento de Pablo Iglesias y considera necesario analizar la permanencia de la coalición

Pepa Gallardo difiere del planteamiento de Pablo Iglesias y considera necesario analizar la permanencia de la coalición

La secretaria general de Podemos Huelva, Pepa Gallardo, tiene claro que la confluencia entre Podemos e Izquierda Unida es una de las causas del mal resultado que obtuvo Unidos Podemos en las pasadas elecciones generales del 26 de junio, cuando la coalición liderada por Pablo Iglesias perdió más de un millón de votos respecto a los sufragios que sólo seis meses antes habían logrado por separado las dos formaciones confluyentes.

Gallardo difiere así del planteamiento realizado hasta ahora por el secretario general de Podemos a nivel nacional, Pablo Iglesias, y se postula a favor de la opinión transmitida por el número dos de los podemitas, Íñigo Errejón, quien consideró que "desde el eje izquierda-derecha es más difícil construir una nueva mayoría".

Aunque ha indicado que está esperando un análisis más profundo por parte de la dirección federal del partido, la máxima responsable de Podemos en Huelva está convencida, en cualquier caso, de que hay que analizar "si es buena la permanencia" de la coalición con Izquierda Unida, con lo que Gallardo se suma al bloque menos izquierdista de la formación morada.

Desde el punto de vista electoral, Podemos se enfrenta a la disyuntiva de si continuar con el giro hacia la izquierda que dio a raíz de las elecciones del 20 de diciembre, tras lo que defendió un pacto de gobierno con el PSOE y posteriormente decidió presentarse en coalición con IU, o si regresar a su mensaje anterior, el que situaba a Podemos como un partido que no es ni de izquierdas ni de derechas, sino de abajo frente a los de arriba.

El giro a la izquierda le ha podido quitar más de un millón de votos en las últimas elecciones, si bien es su imagen de partido de izquierdas la que, probablemente, le haya permitido alcanzar los cinco millones de votantes y nutrirse de gran parte del electorado perdido por el PSOE en los últimos años y por Izquierda Unida en las elecciones del 20 de diciembre.