El Partido Popular “ha sembrado el campo electoral de trampas financieras y políticas”

Para Izquerda Unica el objetivo del PP es "hurtar a los ayuntamientos el 60% de sus competencias".

El coordinador provincial de Izquierda Unida, Pedro Jiménez, pide a los alcaldes y alcaldesas, concejales y aspirantes a candidatos de su formación que hagan propuestas electorales encaminadas a hacer de pueblos y ciudades lugares sostenibles, libres de desahucios, exclusión social y les anima a luchar  por poner en marcha medidas que ayuden a la gente a encontrar un empleo.

La mayoría absoluta del Partido Popular en el Congreso y en el Senado ha maniatado a los ayuntamientos con un conjunto de leyes y reformas que pone en alto riesgo la autonomía municipal a la hora de hacer política y garantizar unos mínimos de prestaciones de servicio públicos a los ciudadanos. Izquierda Unida es consciente de la enorme tarea que se avecina a la hora de que sus actuales alcaldes y alcaldesas, candidatos y candidatas y aspirantes a concejales presenten a sus vecinos un programa electoral que pueda cumplirse sorteando la Reforma Local, la Directiva de Servicios, la Regla de Gasto, Ley de Unidad de Mercados o la Ley de Estabilidad Presupuestaria. Por no hablar del proyecto del PP de que gobierne un ayuntamiento la lista más votada incluso con un 20% de los votos y a pesar de que el 80% de los vecinos y vecinas sean contrarios a la lista ganadora. Toda una suerte de escollos, trámites, intervencionismo e incluso trampas que el Partido Popular está repartiendo por el campo electoral antes de las elecciones locales y autonómicas de mayo de 2015.

El objetivo del Partido Popular es conservar el poder a toda costa, consciente de que ciudades como Huelva, donde gobierna desde 1995 con Pedro Rodríguez de alcalde, pueden pasar a manos de la izquierda. El coordinador provincial de Izquierda Unida en Huelva, Pedro Jiménez, lo tiene claro: “El PP y Pedro Rodríguez quieren que la izquierda tenga por delante un camino imposible, intransitable y que no pueda gobernar”. “Aunque para ello hagan trampas o intenten cambiar las reglas del juego cuando van perdiendo y el partido está a punto de concluir”, asegura Jiménez.

Para hacer frente a esta declarada estrategia del Partido Popular, Izquierda Unida ha reunido a los integrantes de asambleas locales en toda la provincia, desde Isla Cristina hasta Almonte y desde Punta Umbría hasta Cala, con parada especial en Huelva. En este encuentro, al que asistieron los dirigentes regionales María del Carmen Cantero, responsable Institucional de IU-Andalucía; Antonio Roldán, responsable de elaboración del Programa Marco; y Francisco Javier Camacho, responsable de Política Institucional de IU en Huelva, se ha recomendado a los alcaldes, concejales y candidatos y candidatas en general que incluyan en sus programas de cara a las municipales de 2015 propuestas que sorteen el fango que suelta el PP.

Los programas de Izquierda Unida en pueblos y ciudades de Huelva incluirán propuestas para hacer de los municipios ciudades sostenibles, libres de desahucios, de exclusión social y lugares donde los vecinos y vecinas puedan participar de las decisiones que se tomen y opinar sobre ellas antes de aplicarse. Y donde los ayuntamientos se conviertan en una herramienta activa para ayudar a buscar empleo a la ciudadanía que requiera su apoyo. Ejemplo de ello está en alcaldías como Zalamea, donde su primer edil, Marcos Toti, ha puesto en marcha un plan de empleo extraodinario, la renta social básica, ayudas a estudio y multiplicado un 650% la partida de ayuda a familias afectadas por la crisis.

El coordinador provincial de Izquierda Unida en Huelva avisa que la maraña de leyes y decretos tejida por el Partido Popular resta un 60% de competencias a los ayuntamientos y tiene claro que la Ley de Estabilidad Presupuestaria del Gobierno de Rajoy ha sido diseñada contra la Junta de Andalucía, la Diputación o los ayuntamientos. Pedro Jiménez advierte que la reforma del artículo 135 de la constitución aprobada de la mano entre PP y PSOE, “con alevosía y nocturnidad”, obliga los ayuntamientos, incluso si tienen superávit, a pagar primero la “deuda financiera” antes que las nóminas de la plantilla municipal o las necesidades primarias de los vecinos. Jiménez lo resume en una frase: “Primero cobran los bancos, luego las personas”. Y dice: “Izquierda Unida está aquí para revertir ese injusto desequilibrio”.