Gabriel Cruz: "Tenemos que estar todos unidos para recuperar las 1.200 hectáreas"

El alcalde de Huelva hace un repaso de sus primeros cien días de gobierno municipal en una entrevista concedida al diariodehuelva.es, donde recalca que el Ayuntamiento ha avanzado "enormemente" en transparencia, participación y calidad democrática.

- Se cumplen 100 días desde que usted accedió a la Alcaldía de Huelva el pasado 13 junio. A grandes rasgos, ¿cómo resumiría su gestión durante este tiempo?

- Para mí han sido 100 días ilusionantes, de mucho trabajo, pero sobre todo de mucha ilusión por arrancar con los grandes proyectos de futuro, las ambiciones que tenemos para esta ciudad. No hemos tenido que aterrizar de nuevo, porque estábamos en contacto estrecho con los ciudadanos y sabíamos de la situación de la ciudad, pero sí hemos estado trabajando para tener un conocimiento más preciso y ajustado de la realidad para poder actuar cuanto antes. Y la primera tarea ha sido la de cambiar la imagen del Ayuntamiento, consiguiendo que la transparencia y la participación presidan el día a día del gobierno municipal y de la ciudad.

- ¿En qué ha cambiado más el Ayuntamiento desde que usted es alcalde?

- Fundamentalmente ha habido un cambio radical en la transparencia, aunque hemos intentado en las primeras acciones de gobierno que ya se viera nuestra forma de entender la ciudad y nuestros compromisos de los ciudadanos. Además de conocer la situación del Ayuntamiento y de la ciudad, hemos avanzado enormemente en transparencia, calidad democrática y participación. Por darles un ejemplo, en sólo cinco días de mi toma de posesión ya se publicaron los bienes de la corporación entrante y saliente, se retransmiten los plenos que por fin son totalmente públicos y pueden ser grabados, he hecho pública mi nómina, se ha convocado la Mesa de los Fosfoyesos y se ha empezado a definir el ‘concejal 28’.

- ¿Y su vida? ¿Ha cambiado en algo? ¿Dedica su tiempo libre a lo mismo que antes?

- Mi vida personal sigue siendo igual. Tengo la inmensa alegría de haber ganado la Alcaldía de Huelva, pero esto no ha hecho cambiar ni mis gustos, ni mis aficiones, ni mis amistades, ni mi entorno o costumbres. La mayor parte de mi tiempo se la debo a la dedicación por esta ciudad y a sus ciudadanos, pero en el tiempo que me sobra sigo haciendo lo mismo de siempre.

- La deuda del Ayuntamiento asciende como mínimo a 374 millones de euros, aunque usted teme que sea mayor y han encargado una auditoría para conocer la situación económica real. ¿Cree que las cuentas municipales pueden ser un hándicap para sacar sus proyectos adelante?

- Las cuentas son la realidad, y la realidad hay que afrontarla, no podemos crear una ficción y sentarla como base, es fundamental conocer con precisión el estado real de las cuentas y el grado de cumplimiento de los contratos públicos. La realidad es nuestra base de trabajo, pero nuestra ilusión queda intacta; tenemos que conocer para poder planificar de manera coherente, rigurosa y seria nuestra propuesta de ciudad y nuestros compromisos con los ciudadanos.

- Hasta ahora sus medidas, o al menos las que han tenido más repercusión, han sido sobre todo de régimen interno, en materia de transparencia y reducción de gastos políticos. Una vez qué se conozca la situación económica real, ¿cuál es la actuación más urgente que debe llevar a cabo el Ayuntamiento?

- Lo más importante no es sólo conocer la situación real, sino también elaborar el presupuesto. Tenemos que recordar que tenemos un presupuesto prorrogado de 2014 porque el anterior equipo de gobierno no quiso reconocer que este Ayuntamiento estaba intervenido y plasmarlo, así que prefirió prorrogar un presupuesto insuficiente para esta ciudad. Nosotros estamos ya elaborando el presupuesto de 2016, en el que tendrán la cobertura necesaria todas las acciones de gobierno. Pero tengo que insistir en que lo que más preocupa a este alcalde es el desempleo, una situación que hace que el ciudadano viva una situación personal muy difícil, pero que también trasciende al día a día de la familia y afecta a la vivienda, a los suministros, alimento, en definitiva que deriva hacia la exclusión social. Por tanto, eso es lo que más me preocupa y el empleo tiene que estar en el centro de las políticas de este gobierno.

- Uno de los temas más candentes de la ciudad es el de la situación de las balsas de fosfoyesos. Parece que el proyecto de Fertiberia no ha convencido a nadie y hubo consenso en la primera reunión de la Mesa de los Fosfoyesos que usted ha presidido. ¿Cree que finalmente podrá llevarse a cabo una solución que convenza a toda la sociedad onubense? ¿Serán capaces de ello?

- Ese es el objetivo y el compromiso de trabajo de todas las fuerza políticas; el compromiso de lograr una recuperación real y efectiva, de la que nos sintamos participes y orgullosos. Y ese objetivo implica las 1.200 hectáreas. Por un lado está el cumplimiento de una sentencia de la Audiencia Nacional, que obliga a Fertiberia a la recuperación de 700 hectáreas, objeto de un proyecto, que no conocemos todavía porque necesita de la culminación del mismo con el cumplimiento de los trámites por las diferentes administraciones. Y luego está la aspiración del Ayuntamiento de recuperar 1.200 hectáreas, a eso aspiramos y para eso hemos convocado una comisión de expertos, donde analizar y debatir las diferentes alternativas para poder apostar por la mejor que dé solución a las 1.200 hectáreas. Y eso va a depender de la capacidad que tengamos de entendernos, de aunar esfuerzos, y de sacar adelante un proyecto todos juntos y Huelva en esto tiene que estar unida.

- Otro asunto pendiente e importante para la ciudad es el desarrollo del proyecto urbanístico de Isla Chica. ¿Cuándo veremos finalizar ese proyecto? ¿Será posible concluirlo en esta legislatura?

- Yo afirmé que el proyecto de Isla Chica había decaído y, por tanto, había que revisarlo y, la punta de lanza, la locomotora que podía activar ese proyecto y el barrio era la construcción del centro de salud. Por eso, en el primer pleno de esta legislatura hemos presentado la modificación urbanística necesaria para acometer el centro de salud. Un proyecto serio y riguroso que habíamos trabajado en la oposición junto con la administración autonómica y que ya ha arrancado. Una vez que pongamos a disposición de la Junta de Andalucía la parcela, se encargará la redacción del proyecto, que la presidenta autonómica, Susana Díaz, se ha comprometido con los onubenses a que esté contemplado en los presupuestos de 2016.

- Otro gran proyecto bloqueado es el Ensanche Sur. ¿Cuál es su situación actual? ¿Qué piensan hacer en ese espacio?

- En el Ensanche se está trabajando en las obras de urbanización, con lo cual se ha roto la dinámica de bloqueo y paralización de este proyecto. Ahora nos toca trabajar con la empresa urbanizadora y con los propietarios para que se vaya cumpliendo la planificación en los tiempos necesarios y podamos sacar adelante un proyecto de más de un millón de metros cuadrados muy importante para esta ciudad.

- Por cierto en el Ensanche Sur está proyectada la Estación del AVE. Usted solicitó una reunión al secretario de Estado de Infraestructuras para conocer la situación del proyecto. ¿Ya le ha respondido?

- No, a día de hoy no hay respuesta ninguna y creo que ha habido tiempo suficiente para atender la petición de reunión de un alcalde, que obedece además a un acuerdo plenario, aprobado con el apoyo de todos los grupos políticos, donde se solicitaba esta información. No sólo no se contesta a un alcalde, sino que se falta al respeto de una ciudad, a Huelva y a sus ciudadanos. Por el momento, vamos a darle un proco más de margen y, si no hay contestación, elevaremos una queja a la persona responsable, porque no se puede menospreciar a una ciudad y, menos aún, con un asunto del que depende su futuro.

- Su partido siempre criticó el estilo “populista” del anterior alcalde. ¿En qué se diferencia su talante y su forma de estar en la calle? ¿Usted también se para a saludar por la calle a la gente que no conoce?

- Yo saludo a la gente que me saluda, y saludo a la gente que conozco, sería grotesco que un ciudadano se fuera abordado por un desconocido, por alguien que puede no conocer ni por los medios de comunicación. Con los ciudadanos hay que relacionarse con cercanía, cordialidad y respeto, esos son los términos que yo me impongo en mi trato con los onubenses.