El Ayuntamiento recurre a la vigilancia policial ante la situación de alarma por la suciedad que se detecta en Huelva
El consistorio pretende, con la colaboración de la Policía Local, reducir el efecto de los excrementos y orines de perros, vertidos ilegales de escombros o el depósito de residuos fuera de horario en la ciudad así como eliminar los 'comederos' callejeros y actitudes incívicas. Las dos primeras semanas de actuación se saldan con más de un centenar de sanciones por incumplir las ordenanzas municipales.
Policías de paisano a petición vecinal vigilarán en Huelva el cumplimiento de los horarios de la basura, los comportamientos incívicos o las normas sobre los excrementos de los animales. Es el recurso del Ayuntamiento ante el cariz de la deriva que está tomando la limpieza en la capital , convertido en un verdadero problema que afecta ya a la imagen turística de la marca Huelva.
Así, una unidad especial de la policía local de Huelva vigila en cada turno de servicio las acciones incívicas relacionadas con el depósito de residuos o los excrementos de animales, incluidos los entorno de algunas tiendas 24horas, convertidas en verdaderos comederos callejeros donde no se respetan las más mínimas normas de salubridad y donde se dejan tirados en mitad de las calles y los portales restos de comidas y residuos plásticos, de aluminio y botellas de cristal rotas. El resultado: proliferación de ratas, insectos y pinchazos de vehículos.
Las dos primeras semanas de actuación se saldan con más de un centenar de sanciones por incumplir las ordenanzas municipales
Se trata de un servicio permanente de agentes de paisano que recorre las calles de la ciudad a petición vecinal.
El operativo inició su actividad hace dos semanas con el objetivo de impedir aquellos comportamientos incívicos que provocan suciedad o el malestar de los vecinos como el depósito de residuos fuera del horario estipulado, el vertido de escombros de manera irregular o el incumplimiento de la ordenanza que obliga a los propietarios de animales de compañía a retirar los excrementos de los mismos y rociar con una solución desinfectante (agua mezclada con vinagre, por ejemplo).
El Ayuntamiento da respuesta a una demanda vecinal, para garantizar el respeto de los espacios comunes de la ciudad. Los ciudadanos que cumplen no deben sufrir las consecuencias de aquellos que no lo hacen.
Por ello, el objetivo de la medida es eliminar el resultado de los comportamientos incívicos para dedicar todos los esfuerzos al cuidado y mantenimiento general de los espacios públicos.
Para conseguirlo, se ha reforzado la coordinación de los servicios de Limpieza y la Policía Local, con una Unidad Especial que patrullan de paisano, durante todo el día y en todas las barriadas de la ciudad, con especial atención a las zonas, fechas y tramos horarios identificadas por el Servicio de Limpieza, trabajando para la concienciación, pero buscando la eficacia a través de la contundencia.
En este sentido, se trata de reforzar las inspecciones destinadas a velar por el cumplimiento de las Ordenanzas Municipales, incluyendo la potestad sancionadora, multando a todos los ciudadanos que sean sorprendidos en conductas incívicas tales como el depósito de residuos fuera de horario o en la vía pública.
Como ha apuntado la concejala de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Milagros Rodríguez, “se trata de multas que van desde los 120 a los 300 euros y que tienen como objetivo principal penalizar acciones totalmente conscientes, comportamientos incívicos, como no recoger los excrementos de los perros o tirar basura fuera, al lado, o en una papelera, en vez de en el contenedor y a horas que no están permitido hacerlo”.
Como ha insistido la concejala “es necesario el compromiso por parte de todos y todas para evitar estas conductas y de forma colectiva, acabar con ellas y la mejor forma es dar ejemplo de respeto al espacio público”.
La edil ha destacado que “hemos recibido muchas peticiones por parte de los vecinos de todos los barrios en los últimos meses, por lo que hemos puesto en marcha esta unidad especial”. En este sentido, la concejala de Infraestructuras y Servicios Públicos, Mariló Ponce, ha señalado que “además de limpiar más, tenemos que conseguir entre todos ensuciar menos y ello pasa inevitablemente por reducir los excrementos de perros y el depósito de residuos en la vía pública”. Todo ello con el objetivo de “tener los espacios públicos y comunes de la ciudad como los onubenses merecen”.
La colaboración ciudadana es indispensable a nivel general en el uso de papeleras, cuidado del mobiliario urbano y de las zonas verdes o recogida selectiva, sin embargo, hay tres acciones fundamentales para mejorar el servicio en las que la implicación de los ciudadanos es fundamental: sacar la basura después de las nueve de la noche y depositarla en el interior de los contenedores; recoger los excrementos de los animales de compañía inmediatamente después de que hagan sus necesidades; y utilizar el servicio de recogida de muebles y objetos voluminosos, un servicio gratuito que sólo requiere una llamada al 959159299 antes de bajar muebles o cualquier objeto voluminoso a la calle.
En las dos semanas de funcionamiento del operativo, la unidad especial de la Policía Local abrió 50 expedientes relacionados con la Ordenanza de Tenencia de Animales. Respecto al vertido de escombros, voluminosos o incluso vehículos en la calle, se abrieron 90 expedientes, 35 de ellos relacionados con el abandono de basuras en el exterior de contenedores o depositados fuera del horario establecido.
