Manuel Carrasco, primer cantante nacional que planta el 'No hay billetes' (sold-out) y llena el Bernabéu
En una noche mágica y emocionante, Manuel Carrasco ha dejado su honda huella en la historia de la música española. Se ha convertido esta pasada noche en el primer artista nacional en llenar el renovado Estadio Santiago Bernabéu en Madrid.
Dicen las crónicas que dijo el isleño: “Es tan bonito que no parece de verdad, no parece que sea cierto. Yo, el pintor de brocha gorda, el ‘triunfito’, estoy llenando el Bernabéu sin que juegue el Real Madrid. ¡Vivamos el momento!”
Y sí fue espectacular la noche. Ya avisó en 2022, cuando estableció un récord al reunir a más de 74.000 personas en La Cartuja, Sevilla, logrando la mayor audiencia en un concierto de un solista español. Ahora, ha repetido su hazaña al llenar el Santiago Bernabéu.
Dicen las crónicas que dijo el isleño: “Es tan bonito que no parece de verdad, no parece que sea cierto. Yo, el pintor de brocha gorda, el ‘triunfito’, estoy llenando el Bernabéu sin que juegue el Real Madrid. ¡Vivamos el momento!”
Esta vez el cantantes de Isla Cristina, además de por los miles de espectadores y fans (más de 70.000) que no fallaron y acudieron a la cita estuvo arropado por Niña Pastori, Luis Fonsi, Camilo, Malú y Juanes. Sí, se desató la locura con tanta estrella.
Una cita con muchos guiños desde Huelva a Madrid y al Real Madrid.
Y en la que no faltó una enorme señal: Presentó una canción creada especialmente para la ocasión y ondeó una bandera LGTB. Carrasco lanzó un mensaje de paz y solidaridad, abogando por el fin de la guerra y el sufrimiento de los niños palestinos. Este gesto recibió una ovación ensordecedora del público.
Un detalle curioso: Con “Volviste”, Carrasco se abrazó al público. Y varias parejas se comprometieron en matrimonio. Se habían recibido 954 peticiones de matrimonio pero se eligieron cinco.
En fin, una noche estelar para Manuel Carrasco que para que no faltase nada, encumbró la marca turística Destino Huelva, creada por la Diputación de Huelva, que no desaprovechó el momento. O, mejor, 'Vive el momento', que diría Manuel Carrasco.
